A pesar de pasarme el día rodeado de chinos, aún no he pisado China y así sigue siendo tras visitar Hong Kong, ya que al parecer cualquier parecido entre ambos es pura coincidencia.
Hong Kong es una ciudad vibrante. Una "city" de verdad si la comparamos con Singapur, que es más bien un pueblo con algunos edificios altos y mucha gente. Hong Kong mezcla de forma única el glamour y la elegancia del distrito financiero con el caos y la sordidez de Kowloon. El skyline nocturno me pareció el más espectacular que he visto y la subida al "Peak", vertiginosa y con unas vistas de la ciudad que lo convierten en visita obligada.
Y la compañía en esta aventura no podía haber sido mejor. Mis niñas (Sole y Miriam), a las que por cierto les mando un besote enorme y les recuerdo que se las echa mucho de menos por Singapur!
13 junio 2008
Hong Kong
Etiquetas: viajes
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4 comentarios:
Ufff, tanto hace ya de tu visita a Hong Kong? como pasa el tiempo. Tienes que aprovechar y visitar China, desde aqui nunca lo vas a tener más cerca, jeje.
Un abrazo!
Decir que no es China es incorrecto, yo añadiría que es más China que China, y puede ser debido a la época de colonialismo británico que albergó una identidad propia. Y el no pasar por el desastre de la Revolución Cultural también ayudó.
Otro caso se da en Taiwán, a pesar del número de independentistas las tradiciones chinas antiguas siguen más vigentes que en el continente.
Es curioso, pero de todas las Chinas (China, Hong Kong, Macao y Taiwán), la República Popular es la menos china de todas (en un sentido global).
Madre mia, eso fue hace dos siglos y tres cuartos por lo menos. Pero fue una pasada de viaje, hay que reconocerlo ^_^
Ains, por momentos se echa de menos singapur...
Quien eres? jaja
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